La rapera Iggy Azalea se une a la larga lista de artistas que venden su catálogo musical a una empresa privada por un monto no especificado, pero que se informa ronda las ocho cifras
Tiempos nuevos para la música y, por tanto, nuevos caminos en busca de la rentabilidad. No es extraño ya escuchar que algún reconocido cantante decide vender su catálogo y la rapera Iggy Azalea se ha unido a la larga lista de artistas que lo hicieron.
Según Billboard, la adquisición de Domain Capital incluye el 100% de la participación de la rapera en su catálogo, que cubre sus éxitos como “Fancy”, “Black Widow” y “Problem”, por un monto no especificado, pero que se informa ronda las ocho cifras.
Su discografía presenta sus lanzamientos bajo Virgin EMI, Island Records y su propio sello Bad Dreams, mientras que su publicación se realiza a través de Sony Music Publishing.
Sin duda, una vía de ingresos que quizá sorprenda, pero que cada vez toman más artistas.
Y no es que Iggy se deshaga de algún disco o álbum, sino que directamente se queda con una gran suma de dinero a cambio de perder todo derecho sobre sus propias creaciones.
Diversos medios especializados han señalado que los principales culpables de esta triste, y hasta cierto punto decadente situación, son las plataformas musicales como Spotify, pues gracias a ellas la gente ha dejado de comprar discos en formato físico y las ganancias por escucha que se generan para beneficio de los músicos no son de lo mejor.
Hace un año, saltaba esta noticia de la mano de Shakira, quien vendió todo su catálogo musical a Hipgnosis, compañía especializada en estas inversiones para su licencia. Adquirió 145 canciones editadas desde 1991, por un precio que no trascendió y que supuso que la cantante perdiera el 100% de los derechos de publicación musical, incluidas las letras.
Fuente: El Diario NY