El casamiento de Miguel Almirón no solo unió dos vidas, sino también dos historias marcadas por la fe, la lucha y un amor que creció a prueba de todo.
En una ceremonia cargada de emoción, cada detalle habló por sí solo: las miradas cómplices, las promesas sinceras y ese ambiente donde se sentía que algo grande estaba empezando.
Este “sí, acepto” marca el inicio de un nuevo capítulo, uno donde todo se vuelve posible cuando el amor es verdadero.
Un día que quedará grabado para siempre, no solo en la memoria de los novios, sino también en la de quienes acompañaron y celebraron este momento tan especial.