The Weeknd, protagonista del evento estrella de la TV estadounidense, el Halftime del Super Bowl, se vio eclipsado por el preshow de su telonera Miley Cyrus.

Un año más, el Super Bowl demostró este domingo 7 de febrero por qué es mucho más que un evento deportivo. En su edición de 2021, la más emotiva y a la vez fría que se recuerda, los Buccaneers de Tom Brady se impusieron a los Chiefs en un encuentro marcado tanto por lo que ocurrió en el terreno de juego como por lo que sucedió en el clásico descanso.

Tras la fiesta latina de Shakira y Jennifer López en 2020, The Weeknd fue el encargado de poner la música, y el espectáculo, a la retransmisión televisiva más vista de Estados Unidos. Lo hizo con una actuación de poco más de 14 minutos en la que no se olvidó de grandes éxitos como Starboy, The Hills y Blinding Lights.

Frente al color y el ritmo que marcaron el show del año pasado, el artista canadiense montó un imponente escenario con la tecnología como punto fuerte. No faltaron los fuegos artificiales en el Raymond James Stadium ni tampoco un multitudinario número de baile que sorprendió sobre el terreno de juego como final de fiesta.

Y junto a la música, un mensaje. En la actuación, para la que el propio cantante ha puesto de su bolsillo 7 millones de euros según su representante, los bailarines aparecieron con el rostro vendado como reflejo de la “cultura absurda de Hollywood” basada en la cirugía plástica y la auto-manipulación, según ha explicado el mismo The Weeknd.

Además de los millones de espectadores que siguen el Super Bowl cada año desde sus casas, el de este 2021 estuvo seguida por cerca de 25.000 personas que se dieron cita en el estadio a pesar de la situación sanitaria.

Según explicó la organización, 7.500 de ellas eran trabajadores sanitarios vacunados e invitados como homenaje. El resto adquirieron su entrada como de costumbre, pero se adaptaron a las medidas de seguridad impuestas en el evento. El resto del aforo se rellenó con hasta 30.000 figuras de cartón para dar una sensación cálida a los espectadores televisivos.

Miley Cyrus, telonera y gran protagonista

En el Super Bowl 2021 no estuvo Rosalía pese a los rumores de estos días, pero sí una Miley Cyrus que robó el protagonismo al artista principal. La cantante actuó como “telonera” del partido, ofreciendo el show que se espera en un evento de estas características.

Ataviada con un look de cheerleader, Cyrus animó el evento versionando algunos de sus grandes éxitos como Party in the USA y Wrecking ball. Joan Jett y Billy Idol fueron dos de los invitados principales del concierto, en el que la artista acabó resucitando el personaje de Hannah Montana a ritmo de The Climb.

El show se celebró ante 7.500 personas vacunadas como público. Desde casa, los espectadores pudieron seguirlo en directo por TikTok.

Fuente: Vertele